El portavoz de la Asociación Pro-Vida de Puerto Rico, Carlos Sánchez solicitó el viernes el cierre de centros de aborto en Puerto Rico tras la determinación del Tribunal Supremo de los Estado Unidos que revocó la decisión de Roe vs Wade.
“Hacemos un llamado a nuestros legisladores y nuestros Gobernantes y el Departamento de Justicia para que hagan cumplir nuestras leyes y pongan fin de inmediato a esta práctica qué le quita la vida a un ser humano inocente”, señaló Sánchez en declaraciones escritas.
“La práctica del aborto en Puerto Rico se ha mantenido operando a lo loco, sin control ni supervisión, comparada con otros campos de la medicina donde se ofrecen alternativas, se informan los riesgos, las complicaciones y cómo llevar una vida saludable, aunque tengas una condición de salud”, dijo Sánchez.
“Para el bebé inesperado hay miles de soluciones: la adopción, el cuidado del Estado o de organizaciones privadas en lo que la mujer se estabiliza, y la crianza por un familiar o amigos cercanos. La solución del abortista es llevarlo a la muerte inmediata. En Puerto Rico se protegen a los animales, la vegetación, el medio ambiente y los recursos naturales, pero para el bebé en el vientre no existe ninguna protección”, añadió.
Sostuvo que “los que favorecen que los bebés sean destruidos en cualquier momento rebuscaran cielo y tierra para destruir nuestros argumentos, pero me parece insólito que son las mismos que se oponen a la pena de muerte en criminales; sin embargo, no le es problema para ellos aplicar la pena de muerte al bebé”.
“Queremos ser solidarios con las organizaciones hermanas y recalcar que con el fin de Roe vs Wade también trae el renacimiento de nuestro Código Penal que prohíbe el aborto en Puerto Rico en los artículos 98 y 99. Este establece claramente que la práctica del aborto en Puerto Rico se cataloga como un crimen y es ilegal. Esperamos que se haga cumplir nuestro estado de derecho para que ninguna persona pueda practicar el crimen del aborto en Puerto Rico”, expuso Sánchez.