WASHINGTON (AP) — El brote de viruela símica en Estados Unidos todavía puede frenarse, dijeron el jueves las autoridades sanitarias estadounidenses, pese a que los casos siguen subiendo y hay un suministro limitado de vacunas.
El secretario de Salud y Servicios Humanos, Xavier Becerra, rechazó las críticas sobre el ritmo de la respuesta y los temores de que Estados Unidos haya perdido la oportunidad de contener al virus, que ha sido declarado emergencia mundial.
“Creemos que hemos hecho todo lo posible a nivel federal para trabajar con nuestros socios estatales y locales y las comunidades afectadas con el fin de asegurarnos de que podemos mantenernos por delante de esto y acabar con este brote”, dijo Becerra, el principal funcionario de salud del gobierno del presidente Joe Biden, a los periodistas en una llamada.
Pero añadió que los funcionarios sanitarios locales “deben hacer su parte… No tenemos autoridad para decirles lo que tienen que hacer”.
Los líderes federales esgrimieron esos argumentos al anunciar los planes de distribución de 780.000 inyecciones de la vacuna Jynneos, que requiere dos dosis. Las dosis se asignarán a los estados, ciudades y otras localidades en función del número de sus casos y del tamaño de sus poblaciones consideradas de alto riesgo para la enfermedad.
Los departamentos de salud de San Francisco, Nueva York, Washington D.C. y otros lugares dicen que aún no tienen suficientes vacunas para satisfacer la demanda y han dejado de programar citas para las segundas dosis de la vacuna con el fin de aplicar más dosis iniciales con las que tienen.
Becerra señaló que el gobierno federal ha hecho su trabajo y dijo que ahora la responsabilidad es de los funcionarios locales para utilizar las herramientas disponibles.
“Hemos puesto a disposición de todas las jurisdicciones vacunas, pruebas diagnósticas y tratamientos mucho más allá de las cifras que se necesitan actualmente”, comentó.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, hasta el miércoles por la noche se habían registrado más de 4.600 casos de viruela símica en Estados Unidos, y las autoridades federales prevén que estas cifras crezcan.
Más del 99% de los casos notificados son de hombres, y la gran mayoría de ellos se dan en hombres que declararon haber tenido contacto sexual con otros hombres, aunque las autoridades sanitarias han subrayado que cualquiera puede contraer el virus.
En la actualidad, Estados Unidos es capaz de realizar pruebas diagnósticas a entre 60.000 y 80.000 personas al día, aunque Becerra dijo que el número de pruebas diarias que se aplican está muy por debajo de esa cifra.
El virus de la viruela símica se propaga principalmente a través del contacto de piel con piel, pero también puede transmitirse a través del contacto con la ropa de cama utilizada por alguien infectado. Las personas con viruela del mono pueden experimentar fiebre, dolores corporales, escalofríos y fatiga. Muchos de los afectados por el brote han desarrollado protuberancias, a veces dolorosas, parecidas a un grano.