El presidente estadounidense Joe Biden extendió la prohibición de desalojos de viviendas hasta el 30 de junio para ayudar a los propietarios afectados por la pandemia de coronavirus.
La moratoria sobre los desalojos de hipotecas garantizadas por el estado federal vencía el 31 de marzo. En su primer día en el cargo Biden extendió la moratoria desde el 31 de enero. Cifras de la Oficina del Censo revelan que casi el 12% de propietarios con hipotecas están retrasados en el pago de las cuotas.
La Casa Blanca dice que las acciones coordinadas anunciadas el martes por los departamentos de Vivienda, Asuntos de Veteranos y Agricultura también extienden hasta el 30 de junio la posibilidad de pedir un período de indulgencia —una pausa o reducción de los pagos de cuotas hipotecarias— y añaden hasta seis meses de indulgencia para los deudores que la solicitaron antes del 30 de junio del año pasado.
Según la Casa Blanca, más de 10 millones de propietarios de viviendas son morosos y las medidas de Biden buscan ayudar a la gente a conservar sus casas en medio de una “crisis de asequibilidad de vivienda” provocada por la pandemia. Dice que “los propietarios recibirán un alivio que necesitan con urgencia mientras enfrentamos esta emergencia nacional sin precedentes”.
El gobierno dijo que la extensión de las indulgencias “darán apoyo crucial a propietarios de color, que constituyen un sector desproporcionado de deudores” que tienen problemas para pagar sus cuotas debido a las penurias ocasionadas por la pandemia.
Las medidas anunciadas el martes no mencionan una moratoria sobre el desalojo de inquilinos que se han atrasado en el pago del alquiler y que rige hasta el 31 de marzo.