Gobernador realiza peticiones al Congreso para incluir a Puerto Rico en programas de ayuda tras paso de huracán Fiona

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Foto: Gobernador Pierlusi

El gobernador de Puerto Rico, Pedro R. Pierluisi, urgió al Congreso a que incluyan a Puerto Rico en el posible paquete de medidas suplementarias y de ayudas en casos de desastre que tendría ante su consideración, antes del fin del año fiscal 2022. El primer mandatario planteó que atender las prioridades y necesidades críticas para la Isla permitirá adelantar el paso entre la etapa de respuesta y la recuperación, luego del impacto del huracán Fiona, así como la reconstrucción, a raíz de los huracanes de 2017 y los terremotos de 2020. 

Así lo dejó saber en una misiva enviada a la presidenta de la Cámara de Representantes federal, Nancy Pelosi y al líder de la mayoría en el Senado, Charles Schumer, al igual que a los líderes republicanos en la Cámara y el Senado, Kevin McCarthy y Mitch McConnell, respectivamente. 

“Les agradezco su continuo liderazgo a favor de Puerto Rico, mientras nos recuperamos del huracán Fiona que azotó la Isla la semana pasada. Reconozco y aplaudo la acción rápida del gobierno federal para que los ciudadanos americanos que viven en Puerto Rico cuenten con los recursos necesarios para proteger vida y propiedad”, acotó el gobernador, quien de inmediato planteó las cinco prioridades del Estado para que el gobierno federal las tome en consideración.

100 por ciento en Medicaid 

En contraste con los 50 estados y el Distrito de Columbia, el programa Medicaid en Puerto Rico es limitado y el impacto del huracán Fiona impone severas restricciones fiscales, adicionales al sistema de salud en la Isla, así como al presupuesto en general. Por lo tanto, tal y como sucedió tras el paso del huracán María en el 2017, el primer mandatario solicitó que el gobierno federal cubra en un 100 por ciento el Federal Medical Assistance Percentage (FMAP), que se destinen $400 millones para eliminar el déficit corriente y se continúe el aumento de $200 millones para suplementar los pagos a proveedores.

“Solicito que estos ajustes sean efectivos a partir de la fecha en la que se hizo la Declaración de Emergencia”, dijo Pierluisi en alusión al domingo 18 de septiembre, fecha en la que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ordenó al Departamento de Seguridad Nacional (Homeland Security) y a la Agencia Federal de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés) a realizar los esfuerzos necesarios para salvar vidas y proteger propiedades en los 78 municipios. 

Inclusión en D-SNAP 

Al igual que en Medicaid, la asistencia que se brinda en la Isla a través del Programa de Asistencia Nutricional (PAN) es tiene un tope y, por lo tanto, después de un desastre natural, debe ampliarse. Ante esto, Pierluisi solicitó que, por un periodo de tres meses, la Isla sea parte del Programa de Asistencia Suplementaria para Nutrición en Caso de Desastres (DSNAP, por sus siglas en inglés). El gobernador recordó que, en octubre de 2017, se aprobaron $1.27 billones en fondos de Asistencia Nutricional Suplementaria, lo cual es necesario nuevamente luego del huracán Fiona.

Recursos para FEMA

En torno a su petición de un financiamiento adecuado para el Disaster Relief Fund de FEMA, el gobernador explicó que, a pesar de que el gobierno central está trabajando para atender adecuadamente los daños causados por el huracán y las lluvias asociadas al mismo, “necesitamos que FEMA cuente con los recursos adecuados para administrar los programas A y B, así como los múltiples trabajos federales relacionados”.

Por otra parte, y relacionado a FEMA, Pierluisi solicitó que se vuelva a incluir una enmienda congresional que le permita a la agencia federal financiar proyectos vinculados a la restauración de infraestructura dañada por el huracán, de forma que la misma pueda ser reconstruida bajo los códigos de construcción y estándares de seguridad más recientes.

Programas de agricultura

En torno a la crítica situación de la agricultura en la Isla por los daños sufridos a causa del huracán Fiona, el gobernador solicitó que el Congreso provea fondos adicionales y flexibilidad a todos los programas del Departamento de Agricultura federal (USDA, por sus siglas en inglés) en la Isla, para que puedan atender las necesidades de Puerto Rico en esta área tan importante. De hecho, instó a que el USDA destine más fondos al Emergency Relief Program para ayudar directamente a los agricultores afectados por el huracán y que, por al menos un periodo de 30 días, se provea abastecimiento de alimentos para ganado, aves de corral, entre otros, mediante el Feed Assistance Program.

En la misiva, el gobernador planteó que otras iniciativas congresionales también ayudarán a la recuperación y reconstrucción de Puerto Rico, al proveer los recursos adecuados, eliminar la burocracia y simplificar los procesos, más aún cuando, desde el huracán María, se han emitido cuatro Declaraciones de Desastre Mayor. A esos efectos, recomendó que FEMA “aumente significativamente” los fondos para Puerto Rico en programas particulares como el STEP, más allá de los topes establecidos, para que, entre otras cosas, se hagan las reparaciones necesarias y sustanciales a residencias dañadas. Pierluisi explicó que esto es necesario porque se debe tener en cuenta el impacto de la inflación, la escasez de mano de obra y los problemas en la cadena de suministros.

En torno a la energía eléctrica, y a medida en que se van utilizando los fondos para la reparación de la red, Pierluisi instó al Congreso a que provea los fondos necesarios para la instalación de paneles solares, así como sistemas de energía solar a plantas de tratamiento y bombeo de agua. “Una opción sería el proveer los recursos necesarios al Fideicomiso de Energía Verde, creado en el 2019, para que, mediante su apoyo económico, personas de escasos recursos puedan tener acceso a sistemas de energía verde”, propuso el gobernador.

De otra parte, y en torno a los múltiples trabajos que se realizan en la Isla desde el 2017, Pierluisi presentó una serie de recomendaciones relacionadas directamente a FEMA para agilizar los trabajos de reconstrucción, más aún con las múltiples Declaraciones de Desastre que conllevan distintos procesos de ejecución.

“Por los pasados cinco años, Puerto Rico y FEMA han enfrentado eventos naturales catastróficos y múltiples Declaraciones de Desastre con diferentes políticas, reglas y costos compartidos para abordar pérdidas en las mismas áreas geográficas, con los mismos solicitantes y, en muchos casos, en las mismas instalaciones.  El hecho de tener que diligenciar programas relacionados a desastres y, a su vez segregar los costos asociados, resulta muy oneroso no tan solo para el Gobierno de Puerto Rico sino para FEMA. Por esto, sugiero que los costos de manejo de emergencias se trabajen por cada evento; sin embargo, todo el trabajo permanente debe ser unísono y con políticas y costos compartidos que sean consistentes con la Declaración del Huracán María (90/10)”, indicó Pierluisi, quien también requirió que se revisen otras políticas de FEMA, incluyendo que se aumente de un 25 a un 50 por ciento el programa de desembolsos de Working Capital Advance (WCA), que impacta directamente a los municipios, a la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) y la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA).

“Durante los pasados años los ciudadanos americanos de Puerto Rico han enfrentado diversos eventos retantes, tales como la crisis fiscal, desastres naturales y el impacto del COVID-19. La acción congresional es necesaria y urgente para atenuar los daños, tanto del huracán Fiona, como los de los pasados años. A nombre del pueblo de Puerto Rico, les agradezco de antemano su pronta atención a estas peticiones”, concluyó el gobernador.

La misiva enviada ayer al Congreso, es tan solo una de las gestiones que ha realizado el gobernador para mitigar el impacto del huracán en la Isla. A principios de la semana pasada, el presidente Biden, aprobó por solicitud suya, la Declaración de Emergencia y la Declaración de Desastre Mayor. Además, entre múltiples otras acciones, ha visitado directamente diversos municipios para inspeccionar los daños de primera mano, acompañado de la administradora de FEMA, Dianne Criswell, congresistas y jefes de agencias.