CHICAGO (AP) — Un juez suspendió el lunes la fecha límite del 31 de diciembre para que los policías de Chicago se vacunen contra el COVID-19, pero no alteró la orden de que se hagan la prueba con frecuencia.
Las disputas por las vacunaciones deben ser presentadas a un mediador como una reclamación laboral, determinó el juez del condado Cook Raymond Mitchell.
“El objetivo de esta orden es que las partes regresen a la mesa de negociación para promover la paz laboral al permitirles buscar” soluciones bajo la ley de Illinois, dijo Mitchell.
Los agentes que no han sido vacunados deberán realizarse la prueba dos veces por semana bajo la norma municipal. Los agentes también pueden perder su empleo y pagar si no dan a conocer su estado de vacunación.
“El principal riesgo para quienes no están vacunados es para ellos mismos y las otras personas que deciden no vacunarse”, expresó el juez.
El gobierno de la alcaldesa Lori Lighfoot anunció la política de vacunación hace semanas, lo que generó firmes objeciones por parte de sindicatos policiales.
El juez señaló que el COVID-19 ha matado a muchos agentes a nivel nacional.
“Considerando el terrible sacrificio, la petición de los sindicatos policiales de que escuchen sus soluciones parece una tarea bastante modesta”, indicó Mitchell.