NUEVA YORK (AP) — Aproximadamente 429.000 bancos de energía portátiles están siendo retirados del mercado porque pueden sobrecalentarse y potencialmente incendiarse mientras cargan teléfonos, lo que representa un riesgo de quemaduras para los consumidores.

Según un aviso publicado el jueves por la Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor de Estados Unidos, Casely está retirando algunos de sus «Power Pods» después de recibir 51 informes de que la batería de iones de litio de los cargadores se sobrecalentó, expandió o incendió durante su uso, lo que resultó en seis lesiones menores por quemaduras hasta la fecha.

Los Casely Power Pods ahora retirados, que tienen una capacidad de batería de 5000mAh, pueden identificarse por su número de modelo: E33A. Los cargadores inalámbricos fueron fabricados en China, señala el aviso del jueves, y se vendieron en Amazon, getcasely.com y otros sitios web entre marzo de 2022 y septiembre de 2024.

Se insta a los consumidores en posesión de estos cargadores, que venían en una variedad de colores y estampados, a dejar de usarlos de inmediato y contactar a Casely para obtener un reemplazo gratuito.

Aquellos que sean elegibles recibirán un nuevo «Power Pod Certificado por UL», señala una sección de preguntas frecuentes en el sitio web de Casely. La compañía con sede en Brooklyn, Nueva York, también dice que todos los demás paquetes de baterías no incluidos en este retiro siguen siendo seguros para usar.

Casely escribió en su anuncio de retiro: «Casely está comprometido con la seguridad de sus clientes y, por precaución, ha tomado medidas proactivas para retirar de circulación productos potencialmente defectuosos. Si su Power Pod califica, lo reemplazaremos por una unidad completamente nueva sin costo para usted».

Para recibir un reemplazo gratuito, los consumidores deberán completar un formulario en línea y enviar fotos del cargador retirado que poseen, con la palabra «Recalled» y la fecha escrita en él con un marcador permanente. Pero la CPSC y Casely también enfatizan que los dispositivos con baterías de iones de litio no deben desecharse en la basura o en contenedores de reciclaje general, instruyendo a los consumidores a buscar orientación local para su eliminación.