BERLÍN (AP) — El gobierno de Alemania informó el lunes que tomará una participación del 23% en una compañía alemana que trabaja en una posible vacuna contra el coronavirus y que su determinación es mantener en el país empresas clave, previniendo que salgan.
El banco estatal de desarrollo KfW comprará 300 millones de euros (337 millones de dólares) en acciones de CureVac, precisó el ministro de Economía, Peter Altmaier, y agregó que el objetivo es darle a CureVac “seguridad financiera”.
Dijo que el gobierno no ejercerá influencia en las decisiones de negocios de CureVac.
El principal accionista de CureVac es Dietmar Hopp, cofundador de la empresa de software empresarial SAP, con sede en Alemania.
“Para mí y para todo el gobierno alemán, es… absolutamente elemental que conservemos y fortalezcamos industrias clave prometedoras en Alemania, como las digitales, de inteligencia artificial; baterías eléctricas; la industria química, la industria del acero y muchas otras”, dijo Altmaier. “Eso va en particular para las de biotecnología y las ciencias de la vida”.
En marzo, el jefe de gabinete de la canciller Angela Merkel, Helge Braun, dijo que las autoridades alemanas habían tenido un “contacto muy intenso” con CureVac, luego de que hubo “planes de atraerla a Estados Unidos”.
Braun no entró en detalles sobre la naturaleza del interés estadounidense. CureVac y el entonces embajador estadounidense en Alemania rechazaron entonces el informe de un periódico de que el presidente Donald Trump aparentemente le había ofrecido a la empresa alemana fondos importantes para asegurar su trabajo para Estados Unidos.
Altmaier reconoció que “el desarrollo de vacunas, y productos médicos en general, puede conllevar riesgos y la posibilidad de fracasos”.
“Pero debemos examinar toda oportunidad y darle a las empresas innovadoras la oportunidad de demostrar su valía”, agregó. “Estoy convencido de que CureVac merece esa oportunidad”.
El anuncio se produce apenas dos días después de que la farmacéutica AstraZeneca llegó a un acuerdo con una alianza formada por Alemania, Francia, Italia y Holanda para suministrar hasta 400 millones de dosis de una vacuna experimental contra el virus que causa el COVID-19. Todos los demás Estados miembros de la Unión Europea tendrán la oportunidad de participar.