Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) suavizaron el viernes sus recomendaciones de uso de mascarillas, incluso para las escuelas, como parte de una guía actualizada para lidiar con el COVID-19.
La directora de los CDC, Rochelle Walensky, advirtió que es posible que las medidas deban regresar “en caso de que las cosas empeoren en el futuro”.
Según las nuevas directrices, más del 70 por ciento de la población de los Estados Unidos se encuentra en un área con un nivel comunitario de COVID-19 “bajo” o “medio”, lo que significa que no se recomiendan mascarillas para el público en general.
En áreas con un nivel “alto” (actualmente alrededor del 30 por ciento de la población de los Estados Unidos), las mascarillas aún se recomiendan en lugares públicos cerrados, y por debajo del nivel “medio”. Además, las personas con mayor riesgo deben consultar a su médico sobre el uso de una mascarilla.
Sobre las escuelas, estableció el CDC, el uso de mascarillas en las escuelas ahora solo se recomienda en áreas con un nivel “alto”.
Las nuevas directrices se basan más en preservar la capacidad hospitalaria que las métricas anteriores, que se centraron en el número total de casos, un reflejo de una nueva fase en el manejo de la pandemia a medida que la ola de infecciones por Omicrón ha disminuido.
Aún así, el CDC estableció que el virus representa un riesgo particularmente para las poblaciones inmunodeprimidas y otras poblaciones vulnerables.
