La Oficina de Administración y Transformación de los Recursos Humanos del Gobierno de Puerto Rico (OATRH) y la Oficina de Ética Gubernamental (OEG) formalizaron un Acuerdo Colaborativo con el fin de continuar profesionalizando la carrera del servidor público y garantizar la capacitación del recurso humano. Ambas agencias mantendrán una alianza que permita el continuo desarrollo profesional de los servidores públicos con énfasis en temas sobre la ética.
La OEG determinó qué cursos específicos contenidos en los diversos catálogos de educación continua de los recintos de la Universidad de Puerto Rico (UPR) cumplen con los requisitos de acreditación para ser convalidados por su Centro para el Desarrollo del Pensamiento Ético como adiestramientos en materia de ética. La Ley Orgánica de la OEG dispone en su Artículo 3.3 que, cada dos años, todo servidor público de la Rama Ejecutiva debe cumplir un mínimo de 20 horas en cursos en materia de ética.
La convalidación para los servidores públicos de las horas contacto de los cursos será para el periodo bienal vigente que comprende las fechas del 1 de julio de 2022 al 30 de junio de 2024 y los empleados podrán tener acceso al catálogo de los cursos próximamente.
Además de los recursos provistos por la UPR, mediante el Acuerdo ALI-UPR firmado recientemente, la OATRH se compromete a proveer sus propios recursos en la consecución de la creación, desarrollo y ofrecimiento de talleres o adiestramientos relacionados a la disciplina de la ética en los Recursos Humanos para ampliar el banco de recursos de los ofrecimientos de la OEG.
La licenciada, Zahira A. Maldonado Molina, directora de la OATRH, puntualizó que este Acuerdo facilita el que los empleados cumplan con su deber de educación continua en materia de ética y se continúen profesionalizando en sus áreas. De esta manera se hace un uso más eficiente del tiempo de nuestros servidores públicos, ya que el adiestramiento que tomen para capacitarse en sus respectivas áreas profesionales les contará para el cúmulo de sus horas requeridas por la Ley Orgánica de la OEG.
“Tenemos un compromiso desde la OATRH con la mejora constante en nuestras operaciones gubernamentales y el bienestar de nuestra sociedad. Es fundamental resaltar dos pilares esenciales que sustentan nuestra labor como funcionarios públicos: la educación y la ética. A través de programas de capacitación, los servidores públicos pueden adquirir nuevas habilidades técnicas, desarrollar competencias de liderazgo y gestión, mantenerse actualizados sobre las mejores prácticas y políticas en su campo, lo que facilita la maximización de los servicios a la ciudadanía, que al final del día, es nuestro deber. Al mismo tiempo, adquieren conocimientos en materia de ética gubernamental y reciben crédito a favor de las horas de adiestramiento requeridas en esta materia”, expresó Maldonado Molina.
Bajo el Acuerdo Colaborativo, la OEG convalidará como equivalentes en horas de educación continua en ética gubernamental las horas contacto de los cursos contenidos en el catálogo ALI-UPR, con ciertas excepciones, que serán ofrecidos en los 11 recintos de la UPR. Como ejemplo de los cursos convalidados se atienden competencias en el desarrollo humano, atención al ciudadano, gestión pública, planeación institucional, gestión de calidad, informática, destrezas comunicativas, desarrollo interpersonal y estudios jurídicos, entre otros. Para beneficio de los participantes, los cursos, en su mayoría, se ofrecerán en la modalidad presencial o a distancia.
Por su parte el director ejecutivo de OEG, Luis A. Pérez Vargas, indicó que la ética “representa un papel fundamental en la toma de decisiones. Como parte de nuestra función preventiva, continuamos estrechando acuerdos con las agencias gubernamentales, para repasar y educar sobre la importancia de mantener comportamientos éticos en nuestras áreas de trabajo. De esta manera cumplimos no solo con nuestras funciones como servidores públicos, sino también con nuestra responsabilidad individual de mejorar la eficiencia y la calidad de los servicios que ofrecemos en bienestar de nuestra sociedad”.
La directora de la OATRH concluyó que al invertir en programas exhaustivos y actualizados “nos comprometemos a garantizar que nuestros empleados cuenten con las herramientas necesarias para abordar dilemas éticos de manera informada y responsable”.
