Más de 100 millones de personas podrían morir de forma inmediata en todo el mundo si estalla una guerra nuclear entre la India y Pakistán, que estaría seguida de una hambruna global, según un estudio publicado hoy en la revista científica Science Advances.

“Esa guerra amenazaría no solo los lugares a donde las bombas se lanzarían sino al mundo entero”, dijo uno de los autores del análisis, Alan Robock, del Departamento de Ciencias Ambientales en la Universidad Rutgers-New Brunswick.

Para elaborar este estudio, los expertos trabajaron sobre un hipotético escenario de guerra entre ambos países en 2025.

Se estima que la India y Pakistán, que han vivido varios conflictos por el territorio de Cachemira, podrían disponer de entre 400 y 500 armas nucleares.

Esos armamentos tendrían un poder explosivo desde los 15 kilotoneladas -equivalente a la bomba que el país detonó sobre Hiroshima (Japón) en 1945- y hasta algunos cientos de kilotoneladas.

(Una kilotonelada equivale a 1.000 toneladas de trinitrotolueno o dinamita).

En el supuesto de que la India usara 100 armas nucleares estratégicas y Pakistán empleara 150, los científicos calcularon que de 50 millones a 125 millones de personas morirían por los efectos directos de ese armamento en menos de una semana.

La cifra supera la de muertos durante los seis años de la Segunda Guerra Mundial, pero el saldo total de fallecimientos de un eventual conflicto indo-pakistaní podría extenderse a todo el mundo con una hambruna global.

La investigación también apunta que los fuegos desencadenados por la explosión de armamento nuclear podrían emitir entre 15 y 36 millones de hollín a través del humo que podría expandirse por otras partes del mundo en cuestión de semanas.

El hollín absorbería la radiación solar, calentaría el aire y promovería el ascenso del humo a la atmósfera.

Asimismo, la luz del sol que llega a la Tierra disminuiría entre un 20 y un 35 %, se enfriaría la superficie terrestre entre 3,6 y 9 grados Fahrenheit y las lluvias se reducirían entre un 15 y un 30 %.

La recuperación planetaria de estos impactos ambientales tomaría más de una década, ya que el hollín permanecería por largo tiempo flotando en las capas superiores de la atmósfera.

“Nueve países disponen de armas nucleares, pero Pakistán y la India son los únicos que están incrementando rápidamente sus arsenales”, Robock, quien agregó que,”debido a las fricciones continuadas entre estos dos países con armas nucleares, en particular en torno a Cachemira, es importante entender las consecuencias de una guerra nuclear”.

Por su parte, otro de los autores del estudio, Brian Toon, de la Universidad de Colorado, dijo que “una guerra indo-pakistani podría duplicar la tasa normal de muertes en todo el mundo. Esta es una guerra que no tendría precedentes en la experiencia humana”.

Fuente: EFE