El Presidente de la Junta de Directores de la Asociación de Hoteles y Turismo de Puerto Rico (PRHTA, por sus siglas en inglés), Pablo Torres, se mostró hoy sorprendido con la posibilidad de otro cierre total de la economía a causa de la pandemia del Covid-19, ya que “las operaciones de la actividad turística no aguantarían otro cierre y muchos negocios se verían obligados al cese de funciones permanentemente”.

Los integrantes de la PRHTA hicieron las declaraciones en una conferencia de prensa llevada a cabo hoy en el Hotel San Juan Marriott and Stellaris Casino y contó con la participación de socios representantes de hoteles, casinos, restaurantes, atracciones y excursiones.

“Estamos a punto de un colapso total de la economía, si entra en vigor un cierre total nuevamente, nuestra industria ya ha sido afectada lo suficiente en los pasados meses, los despidos de empleados han sido miles, las pérdidas en ingresos para el gobierno ascienden a $271 millones al compararse al mismo periodo del año pasado, según datos de la Compañía de Turismo de Puerto Rico. Esto sería el final para la actividad turística en Puerto Rico”, explicó Torres. “Queremos solicitar a las agencias de ley y orden a que se comience a hacer valer las reglas que se indican en la Orden Ejecutiva, reforzar la vigilancia, establecer los límites y de ser necesario otorgar multas.  No podemos seguir pagando justos por pecadores, cuando solo llevamos operando unos días luego de emitida la nueva Orden, mientras las decisiones aparentan estar tomándose con información previa a la fecha de reapertura limitada”, precisó.

Los representantes del sector volvieron a hacer alusión a la necesidad de supervisión constante de todos los alojamientos alternativos independientes que se mercadean a través de plataformas digitales; junto a las casas y apartamentos de renta a corto plazo con piscina, en donde se están hospedando muchos de los familiares y visitantes extranjeros que están llegando a la Isla para evitar la supervisión y la cuarentena requerida. Esta medida debe incluir sanciones y multas substanciales para los dueños y operadores por cada día de violación a las reglas que se implanten o de lo contrario se imponga el cierre de esa operación. Los números lo muestran, según reportes de Discover Puerto Rico ha habido un aumento en la ocupación de este tipo de negocios por lo que es necesario el refuerzo de medidas de seguridad para garantizar la salud de todos. También es necesario que todo negocio que esté operando debe tener la capacidad de cumplir con los más estrictos protocolos de salubridad y seguridad, de lo contrario no debe operar.

Por su parte Clarisa Jiménez principal oficial de la PRHTA dijo que “enfatizamos nuevamente que no hay necesidad de cierre a los negocios que componen la actividad turística y que cumplen a cabalidad con los protocolos de la Compañía de Turismo y que tienen la certificación de la Guía Operativa de Salud y Seguridad Turística, ya que las medidas de seguridad establecidas por nuestros socios son de primer orden. Nuestros socios, la gran mayoría de los integrantes de la actividad turística, han hecho un esfuerzo titánico y realizado una inversión significativa, para cumplir con los protocolos necesarios, y en muchos casos exceder los requisitos mínimos, con el fin de tener una operación efectiva, salubre y apropiada para recibir todo tipo de público, mientras se protege la salud de todos los empleados”. “La inversión en materiales, equipo, reconfiguración de áreas públicas y el readiestramiento de la fuerza laboral ha sido una labor inmensa, para poder comenzar a operar cumpliendo con los más altos niveles de seguridad, siguiendo parámetros de las organizaciones locales, federales y hasta de las marcas que rigen muchas de las operaciones de nuestros socios. No podemos seguir penalizando al que está siguiendo las reglas y siguiendo los protocolos establecidos”, detalló la Ejecutiva.

Asimismo, durante la conferencia se mencionó la realidad de que los contagios que están sucediendo, no están relacionados a la actividad turística de la Isla, ya que la misma estuvo detenida por meses y solo lleva 13 días en operación. Según datos del propio Departamento de Salud los brotes se han concentrados de forma comunitaria, por ejemplo; congregaciones familiares y reuniones partidistas previo y luego de la primaria, por mencionar algunos.

De igual modo se propuso implementar ciertas medidas para que los sectores de salud y turismo puedan coexistir, ayudándose mutuamente: Estas son:

  • Incrementar el personal de la Policía de Puerto Rico de ser posible activando la Guardia Nacional para hacer cumplir la Orden.
  • Hacer una campaña publicitaria masiva que exhorte a seguir las medidas de protección de contagio y dejar claro a la ciudadanía los riesgos y multas de no cumplir con las restricciones vigentes.
  • Aumentar las pruebas moleculares y la rapidez en dar los resultados de éstas, para conocer la realidad de la situación y poder, de forma oportuna, controlar cualquier contagio detectado.
  • Robustecer el programa de monitoreo de casos para continuar teniendo datos más precisos y confiables.

“A nombre de los más de 80 mil empleados de la actividad turística en Puerto Rico, le exhortamos al pueblo, quienes tenemos la responsabilidad individual de detener esta pandemia, a que sigan las reglas; mantengan el distanciamiento físico, usen la mascarilla, lávense las manos y mantengan el distanciamiento en las reuniones familiares. Esta es la única forma de remar todos en la misma dirección y logar dejar la crisis atrás para regresar a una nueva normalidad”, mencionó. “Nuestra fuerza laboral ha sido duramente golpeada ya que en muchos casos ni tan siquiera pudieron cobrar su seguro por desempleo y han tenido unos meses muy duros para poder mantener a sus familias.  Es por eso que debemos ser empáticos como pueblo y colaborar con estos hermanos puertorriqueños que necesitan trabajar para traer el sustento a sus hogares”, culminó Torres.

La PRHTA cuenta con sobre 400 socios corporativos a los que representa que incluyen: hoteles (grandes, medianos y pequeños), casinos, restaurantes, y socios aliados; que son: líneas aéreas, compañías de transporte, atracciones, villas, operadores de excursiones, proveedores de bienes y servicios a la industria de la hospitalidad, líneas de cruceros e instituciones educativas, entre otros.