Miembros de la Fraternidad Pentecostal de Puerto Rico llegaron hasta la Plaza Barceló en Barrio Obrero en San Juan para orar, dar apoyo a la comunidad dominicana presente en esta zona. Reconocen que poco puede hacer el gobierno estatal para objetar la orden ejecutiva del presidente de los Estados Unidos. Pondrán ante los migrantes los recursos disponibles de la fraternidad que representan.