Ataviadas con la toga verde característica de la cría colegial y con un inmenso orgullo de que ambas lograron sus metas de la mano, madre e hija se graduaron de la Facultad de Artes y Ciencias, durante la centésima octava colación de grados del Recinto Universitario de Mayagüez (RUM) de la Universidad de Puerto Rico (UPR).

Marangelí Torres Torres (derecha) obtuvo el grado de Maestría en el Departamento de Ciencias Matemáticas, y su hija Álani Aldarondo Torres (izquierda) completó su bachillerato en Biotecnología Industrial.

Se trata de Marangelí Torres Torres, quien obtuvo el grado de Maestría en el Departamento de Ciencias Matemáticas, y su hija Álani Aldarondo Torres, quien completó su bachillerato en Biotecnología Industrial.

“Graduarme con mi hija representa un ejemplo para otras madres que tuvieron que poner en pausa sus carreras para criar o interrumpir sus estudios para trabajar y echar para adelante a su familia. Quisiera motivar a esas madres, inspirarlas a que nunca es tarde para lograr los éxitos que algún día se propusieron. En nuestro rol maternal, dejamos de ser de nosotras y somos de nuestros hijos. Es importante volver a encontrarse y hacer lo que nos apasiona. También sirve de modelo a mis hijos, ya que si yo puedo hacerlo, ellos también pueden”, indicó Marangelí, quien es egresada de la clase de 1996 del Departamento de Ingeniería Eléctrica (INEL).

Tras graduarse del Colegio, la ingeniera se dedicó al magisterio, dictando la materia de Matemáticas a estudiantes de escuela superior.

“Llevaba varios años dando clases y sentí el deseo de estudiar, de aprender cosas nuevas en la disciplina que imparto. Quería hacer una maestría enfocada en temas de matemáticas y aquí la encontré. Decidí dejar el salón de clases y dedicarme de lleno a la maestría. Regresé a mi alma mater 25 años después de haber hecho mi bachillerato en INEL y me sentí como en casa. El Colegio es un lugar acogedor, la cultura y el ambiente propician excelencia. Además de hacer la maestría, pude dar clases de Precálculo como instructora, una de las experiencias más gratificantes que he tenido en el Colegio”, sostuvo la educadora.