El director ejecutivo de la Oficina Central de Recuperación, Reconstrucción y Resiliencia (COR3, por sus siglas en inglés), Ottmar J. Chávez Piñero, informó que los municipios de Guayanilla, Mayagüez, Ponce, Salinas, Santa Isabel y Villalba obtuvieron la aprobación de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés) para recibir el Préstamo por Desastre Comunitario (CDL, por sus siglas en inglés) por el desastre de los terremotos del Sur.

El Programa CDL provee fondos operacionales para asistir a las administraciones municipales que tengan una pérdida significativa de ingresos provocado por un desastre mayor, lo cual afecte su capacidad para proveer servicios municipales esenciales.

Las cantidades de los préstamos aprobados para cada municipio fueron: $3,039,700 para Guayanilla; $5 millones para Mayagüez y Ponce; $2,664,775 para Salinas; $3,272,630 para Santa Isabel y $4,735,933 para Villalba.

“Esta ayuda se suma a las alternativas disponibles bajo la asistencia federal de FEMA para los municipios que han sufrido daños y cuantiosas pérdidas ante los sismos del Sur. El préstamo CDL posibilita un alivio económico a las administraciones municipales que necesitan brindar determinados servicios básicos, pero cuyos gastos no son elegibles bajo otros programas de FEMA. En COR3 continuaremos apoyando y asistiendo a los municipios que enfrentan y manejan los efectos de los pasados desastres”, manifestó Chávez Piñero.

Estos fondos CDL se pueden utilizar para servicios municipales esenciales existentes o para ampliar dichas funciones con el fin de cumplir con las necesidades relacionadas al desastre.

“FEMA ha brindado apoyo desde el inicio de los eventos telúricos y ciertamente estos fondos son otra muestra de nuestro compromiso con el pueblo de Puerto Rico. Continuaremos brindando la asistencia necesaria para que nuestros municipios y sus comunidades se recuperen”, comentó el coordinador federal de recuperación de desastres para Puerto Rico y las Islas Vírgenes de Estados Unidos, José Baquero Tirado.

Según establece la normativa de un CDL, la cantidad no podrá exceder la pérdida acumulada de ingresos estimados para el año fiscal del desastre y los tres años fiscales subsiguientes; el 25 por ciento de los gastos operacionales del presupuesto del gobierno municipal para el año fiscal en que ocurrió el desastre; o el máximo de $5 millones que otorga el Programa CDL.

Para cualificar para un préstamo CDL, los municipios deberán demostrar una pérdida significativa —mayor de 5 por ciento— de contribuciones y otros ingresos para el año fiscal o el siguiente como resultado del desastre y no tener pagos atrasados de préstamos previos. Además, los gobiernos municipales deberán garantizar que las leyes estatales no prohíben a los municipios incurrir en deudas como resultado de un préstamo federal.