LONDRES (AP) — El jefe de emergencias de la Organización Mundial de la Salud festejó el miércoles las noticias esperanzadoras sobre la dexametasona, un esteroide barato, luego de que un estudio en Gran Bretaña demostró que el fármaco redujo el número de muertes en enfermos críticos de coronavirus. Sin embargo, el funcionario sostuvo que aún no es momento de modificar los tratamientos.

“Es uno de los grandes avances que necesitaremos para tratar eficazmente el COVID-19, pero los datos son preliminares”, dijo el doctor Michael Ryan en conferencia de prensa. “Reuniremos al grupo de especialistas y tomaremos una decisión sobre nuestro consejo clínico a los países”.

Ryan dijo que “no es el momento de apresurarse a modificar la práctica clínica” y que es crucial determinar las dosis, el método para evaluar a los enfermos y si existen cantidades suficientes de la medicina, entre otros aspectos.

Los investigadores británicos anunciaron sus resultados el martes y el departamento de salud dijo que había aprobado el uso de la dexametasona en todos los enfermos de COVID-19 hospitalizados.

El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, observó que en los últimos dos meses se han registrado más de 6 millones de casos de coronavirus y dijo que la cifra de casos aún se estaba acelerando a nivel mundial. En los primeros dos meses sólo se reportaron 85.000 casos, principalmente de China.