El boxeador Félix “El Diamante” Verdejo se entregó esta noche a las autoridades federales en relación al asesinato de Keishla Rodríguez, cuyo cuerpo fue hallado en la tarde del sábado en la Laguna San José, debajo del puente Teodoro Moscoso. El púgil llegó voluntariamente hasta el Tribunal Federal en Hato Rey luego que se clasificara como sospechoso del asesinato de la joven.
El vehículo de Verdejo, una Dodge Durango, fue ocupado por la Policía durante la madrugada de hoy, domingo, luego de que se indicara que una guagua similar habría sido vista el pasado jueves en videos de las cámaras de seguridad del Teodoro Moscoso.
Más temprano, el Instituto de Ciencias Forenses (ICF) identificó el cuerpo de Keishla, quien estaba desaparecida desde el jueves pasado.
El cuerpo de Rodríguez Ortiz, una joven de 27 años, fue encontrado flotando cerca de un área de mangle, envuelto en una sábana.
Verdejo es elegible para la pena de muerte
El boxeador Félix el Diamante Verdejo Sánchez es elegible para la pena de muerte, por el asesinato y secuestro de Keishla Marlen Rodríguez Ortiz y la muerte de su hijo no nacido, según consta en la denuncia federal sometida por el fiscal federal, W. Stephen Muldrow.
“Al momento de someter esta denuncia, no se ha tomado una decisión sobre buscar o no que se le aplique la pena de muerte en este caso”, dice la denuncia.
De acuerdo con la acusación, Verdejo Sánchez llamó el pasado 27 de abril al testigo cooperador y le pidió ayuda para terminar con el embarazo de Rodríguez Ortiz.
El 29 de abril Verdejo llamo a Rodríguez Ortiz y acordó reunirse con ella cerca de su residencia. Verdejo Sánchez y el testigo cooperador condujeron el vehículo Dogde Durango negro. La mujer llego al lugar en un Kia Forte color gris y abordó el vehículo de Verdejo Sánchez.
Luego de una conversación entre la mujer y el boxeador, él le dio un puño en la cara a la mujer y la inyectó droga que compró en el residencial Luis Llorens Torres, en Santurce. Posteriormente, Verdejo Sánchez y el testigo cooperador amarraron a la mujer de piernas y brazos con un cable. Además, le amarraron un bloque de concreto.
Posteriormente, Verdejo Sánchez y el testigo cooperado condujeron la guagua Durango y el carro de la mujer por el Puente Teodoro Moscoso. En ese lugar, tiraron el cuerpo de la mujer. El relato da cuenta que el boxeador le disparó al cuerpo desde el puente. El carro de la joven fue abandonado en Canóvanas.
El boxeador se entregó a las autoridades federales en la noche del domingo.
