Mediante una sentencia notificada el miércoles, el panel séptimo del Tribunal de Apelaciones, por voz del juez Adames Soto, dejó sin efecto una orden de embargo por 4.7 millones de dólares emitida por el Tribunal de Primera Instancia de Arecibo en contra de la Diócesis de Arecibo.

“El dictamen del Tribunal de Apelaciones es uno correcto en derecho, en tanto reconoce la personalidad jurídica propia e independiente de la forma corporativa de la Diócesis de Arecibo y coloca cualquier potencial responsabilidad en la Iglesia Católica Apostólica y Romana de Puerto Rico, según así denominada por el Tribunal Supremo de Puerto Rico”, expresó el abogado de la Diócesis de Arecibo, Frank Torres Viada en comunicación escrita.

Al así resolver, el Tribunal Apelativo descartó las alegaciones sobre fraude de acreedores realizadas por un grupo de maestros que reclaman el pago de pensiones a la Arquidiócesis de San Juan y al Fideicomiso del Plan de Pensiones para las Escuelas Católicas.

Por último, el tribunal ordenó el traer a la Iglesia Católica al pleito, como parte indispensable en un breve término, so pena de la desestimación del pleito incoado por los maestros demandantes, pertenecientes en su inmensa mayoría a la Academia Perpetuo Socorro y San José.

Foto: GFR Media