La Comisión de Desarrollo Económico, Planificación, Telecomunicaciones, Alianzas Público Privadas y Energía, presidida por el representante, Luis Raúl Torres Cruz, recibió este martes, la comparecencia de Ángel Figueroa Jaramillo, presidente de la Unión de Trabajadores de la Industria Eléctrica y Riego (UTIER), y portavoz de la Alianza de Empleados Activos Jubilados, para conocer en detalles los posibles efectos del contrato de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) con LUMA en el Sistema de Retiro y la transformación del sistema eléctrico.

“¿A qué vino LUMA?, ¿a transformar el sistema o a realizar su negocio?, ¿por qué Luma se molesta de nuestra fiscalización? Nos tenemos que preguntar, ¿a qué le teme LUMA?”, cuestionó Figueroa Jaramillo en declaraciones escritas.

En una ponencia explicativa sobre la Resolución de la Cámara 136, Figueroa Jaramillo, explicó los efectos del contrato de LUMA en las tarifas, convenio colectivo, Sistema de Retiro, la estabilidad de empleo y la garantía de los derechos adquiridos.

De acuerdo con el presidente de la UTIER, uno de los efectos adversos más inmediatos del contrato con LUMA Energy es sobre el proceso de quiebra de la AEE.

“Desde su otorgamiento, el contrato puso a la AEE en un déficit presupuestario de 132 millones de dólares, solamente por virtud del proceso de transición inicial”, explicó Jaramillo.

En relación con la transformación que sugiere el contrato de LUMA, Figueroa Jaramillo mencionó que “entregar todas las funciones a una empresa privada no es una transformación”. De acuerdo con el contrato de LUMA, la empresa privada estará encargada de operar, administrar, mantener, reparar y restaurar la red eléctrica de la corporación pública por un periodo de 15 años.

“La Alianza de Empleados Activos Jubilados quiere que se transforme el sistema eléctrico. Entregar todas las funciones actuales de la AEE a un operador privado no es una transformación. Una verdadera transformación requiere inversión y aportación de expertos. La UTIER y otras organizaciones han hecho propuestas para una verdadera transformación y han caído en oídos sordos. Invitamos a todo el pueblo a que entre a ver nuestras propuestas a través de queremossolpr.com”, expresó Figueroa Jaramillo.

“Luma Energy se hará cargo de las operaciones de la AEE sin invertir un centavo en la AEE o en Puerto Rico. Cobrará una tarifa de 125 millones de dólares y administrarán 14 mil millones de dólares en fondos federales, mientras que la AEE paga por su transición y operaciones”, añadió el portavoz.

Se desprende de la ponencia, que la Junta de Supervisión Fiscal anunció que, para poder implantar el acuerdo, la AEE necesita un préstamo del fondo general del gobierno central por la cantidad de 894 millones de dólares.

“LUMA no le responde al pueblo de Puerto Rico y no está obligada a transformar el sistema eléctrico. De hecho, Luma Energy probablemente mantendrá el sistema eléctrico como está y se limitará a realizar algunas mejoras de infraestructura con los fondos de FEMA. Además, provocará aumentos innecesarios de la tarifa, afectará dramáticamente los derechos de los trabajadores y liquidará el Sistema de Retiro”, aseguró Figuero Jaramillo.

El presidente de la UTIER asegura que “esto no es transformación; esto es un despilfarro increíble de fondos públicos que no sirve a los mejores intereses del pueblo de Puerto Rico. Ya este despilfarro asciende a más de 90 millones de dólares. A su vez, viola las políticas públicas establecidas, intensifica la crisis financiera y empobrece aún más a la población”.

A través de la ponencia de la Alianza, se exige la cancelación y nulidad del contrato. “Un contrato nulo no genera derechos ni obligaciones y obliga a la devolución de las prestaciones. Con una declaración de nulidad, Luma Energy estaría obligada a devolver los más de 90 millones que le ha estafado al pueblo de Puerto Rico y se podrían implantar las medidas sugeridas por la Alianza y la UTIER para una verdadera transformación de nuestro principal activo del país”, aseguró Figueroa Jaramillo.