WASHINGTON (AP) — El gobierno estadounidense llegó a un acuerdo para dar hasta 6.400 millones de dólares a Samsung Electronics para desarrollar un centro de investigación y manufactura de microchips de computadoras en Texas.
El acuerdo anunciado el lunes por el Departamento de Comercio es parte de una inversión total que, con fondos privados, podría ascender a 40.000 millones de dólares. El proyecto se deriva de la Ley CHIPS y Ciencia, que el presidente Joe Biden firmó en 2022 con el objetivo de revivir la producción de circuitos integrados avanzados en Estados Unidos.
“El proyecto propuesto convertirá a Texas en un avanzado ecosistema de semiconductores”, declaró la secretaria de Comercio Gina Raimondo en teleconferencia con reporteros. “Nos coloca en la vía de alcanzar nuestra meta de producir el 20% de los chips más avanzados de computadoras del mundo en Estados Unidos para fin de la década”.
Raimondo añadió que el proyecto creará por lo menos 17.000 empleos de construcción y más de 4.500 empleos de manufactura.
El proyecto de Samsung en Taylor, Texas, incluirá dos fábricas que producirán chips de dos y cuatro nanómetros. Habrá también un centro dedicado a la investigación y el desarrollo, y otro para elaborar las envolturas de los componentes de los chips.
Se prevé que la primera fábrica inicie operaciones en 2026, y la segunda en 2027, según el gobierno. El financiamiento también permitirá la ampliación de instalaciones de Samsung ya existente en Austin, Texas.
Lael Brainard, director del Consejo Económico Nacional de la Casa Blanca, dijo que gracias al acuerdo Samsung podría fabricar chips en Austin directamente para el Departamento de Defensa. El acceso a las tecnologías de punta se ha convertido en un problema de seguridad nacional en medio de una intensa competencia entre Estados Unidos y China.
Aparte de los 6.400 millones de dólares, Samsung ha indicado que podrá recibir un crédito impositivo del Departamento del Tesoro estadounidense.
El gobierno ha anunciado previamente acuerdos para respaldar a otros fabricantes de chips como Intel y Taiwan Semiconductor Manufacturing Co en proyectos en distintas partes del país.