Tras entrar en vigor la Orden General 2024-01 el pasado 7 de febrero, la Policía Municipal de San Juan pone en marcha las nuevas guías operacionales para atender las víctimas de violencia doméstica en las instalaciones policiacas de dicho Municipio.
“La prioridad de nuestra administración municipal es atender con responsabilidad, diligencia y premura cada caso de violencia doméstica que se nos presente. Con esta Orden General, establecemos unas guías claras y específicas para que todo miembro de la Policía Municipal de San Juan pueda manejar estos casos observando los más altos estándares de respeto, sensibilidad y empatía, siempre centrándose en el bienestar de la víctima,” afirmó el alcalde de la Capital, Miguel A. Romero Lugo.
La nueva orden general, que es cónsona y uniforme con las políticas ya establecidas para estos casos por el Negociado de la Policía de Puerto Rico, establece que toda víctima que acuda a un precinto o instalación policíaca del Municipio de San Juan para reportar cualquier incidencia de violencia doméstica, debe ser atendida de manera inmediata en el mismo cuartel o unidad donde presente su querella.
Asimismo, el agente o miembro de la Policía Municipal que reciba a la víctima, le ofrecerá custodia y seguridad, y deberá reportar el caso a su supervisor inmediato, como también a la División de Violencia de Género y Asuntos Juveniles de la Policía de Puerto Rico. Una vez se tomen los datos generales de la o el querellante, se moverá a un área privada donde se pueda garantizar la confidencialidad del proceso. Cada incidencia será reportada en primera instancia a la Oficina para el Desarrollo Integral de la Mujer (ODIM) del Municipio de San Juan a través de la línea 939-CONTIGO (939-266-8446), y cuando así el caso lo amerite, se referirá el mismo a la intercesora de la Oficina de la Procuradora de las Mujeres y/o al Técnico de Víctimas del Departamento de Justicia, como también al Departamento de la Familia.
Comenzando ayer, todos los comandantes de cuarteles y las unidades de la Policía Municipal de San Juan recibirán un adiestramiento completo sobre las nuevas guías a seguir, ya que será compulsorio aplicarlas en cada caso de violencia doméstica, como también se deberá documentar debidamente cada incidencia con el fin de asistir a la víctima en todos los procesos investigativos y de orientación que estén a su disposición.
“Reiteramos que cada caso de violencia doméstica que recibamos será tratado de forma profesional, eficaz y libre de prejuicios por razón de género, edad, religión, raza, orientación sexual, o identidad de género. De igual forma, procuraremos toda la ayuda que necesite la víctima, incluyendo orientación sobre los servicios de apoyo integral que puedan estar disponibles,” indicó Juan Jackson Rodríguez, comisionado interino de la Policía Municipal de San Juan.
“De otra parte, el nuevo protocolo dispone que la Oficina de Seguimiento y Apoyo a Víctimas de Violencia Doméstica (OSAVVD) de la Policía Municipal proveerá transportación a los albergues en casos de emergencia, esto en colaboración con la línea 939-CONTIGO, la cual realiza las gestiones con los albergues disponibles. Asimismo, cuando se atienda un caso de violencia de género en el cual se expida una orden de protección final, se referirá el caso a la OSAVVD, para que la o el querellante se oriente sobre las diferentes ayudas que podría recibir”, añadió el alcalde Romero Lugo.
Otro aspecto nuevo de la orden es que de haber mascotas pertenecientes a la parte perjudicada y esta no pudiera asumir el cuidado de la mascota, en primera instancia se intentará identificar un familiar de la víctima que se haga cargo de esta de forma temporera. Si esa alternativa no es posible, por la razón que sea, los agentes municipales contactarán el oficial a cargo de la oficina de protección de los animales municipal para que canalice la custodia necesaria a través del albergue de animales del municipio.
“El Alcalde y la Primera Dama de la Capital, han pedido que la orden general sea una holística y contemple todos los posibles escenarios para que la víctima se sienta segura y confiada que ella y los suyos estarán a salvo. Es nuestro deber como oficiales de orden público garantizar que así sea. Por eso, con el aval de la directora de la Oficina para el Desarrollo Integral de la Mujer, redactamos esta Orden General y estaremos capacitando a nuestro personal las veces que sean necesario para que se cumpla con el propósito de proteger la vida de las partes perjudicadas y ofrecerle todo el apoyo y empatía que requieren en estos momentos de tanta incertidumbre”, destacó el comisionado Jackson.
