Mediante una ronda preventiva de pruebas realizadas entre la población del Centro de Tratamiento Social (CTS) de Ponce, se logró detectar dos casos positivos de COVID-19 en jóvenes transgresores, que se encuentran asintomáticos, informó el martes, el secretario del Departamento de Corrección y Rehabilitación (DCR), Eduardo Rivera Juanatey.

“Luego de que el pasado viernes recibiéramos notificación de que una oficial arrojó positivo al virus, además de las medidas que anunciamos, se coordinó y eventualmente ordenamos la toma de pruebas moleculares a más oficiales y a toda la población como medida cautelar. Como resultados de ello, los 17 oficiales a los cuales se les administró la prueba arrojaron negativos. Mientras que dos de los 39 jóvenes que integran la institución, dieron positivos, aunque su condición es asintomática. Se activaron los protocolos, por lo que estos fueron aislados y se colocó en vigilancia al resto de la población, a pesar de estos ya haber arrojado resultados negativos. Además, se coordinó una desinfección adicional para todas las áreas de la institución”, detalló el secretario de Corrección en comunicación escrita.

Este añadió que, conforme a los protocolos, el equipo médico de Physician Correctional, proveedor de servicios de salud de la población correccional, examinó a ambos jóvenes, quienes se encuentran en buen estado de salud y no presentan síntomas.

“Los familiares de los jóvenes fueron notificados por el personal médico y se aclararon todas las dudas sobre su condición asintomática. El equipo de Physician Correctional continuará monitoreando la salud de estos y del resto de la población, así como de los empleados. Como mecanismo preventivo, se realizará una tercera ronda de pruebas a empleados adicionales, tanto a oficiales como a personal civil. De esta forma, todos los empleados de la institución serán sometidos al proceso de pruebas”, señaló Rivera Juanatey.

“Proteger la salud de nuestra población es una prioridad. Estamos dando seguimiento a la salud de estos jóvenes, así como a la de los oficiales de la institución, donde se presentó el primer caso positivo en el sistema correccional”, aseguró el funcionario.

“Mantenemos un plan agresivo para reducir los focos de contagio. Este incluye la desinfección de facilidades, la toma de temperaturas a todo el que accede a las instituciones, la realización de pruebas a confinados de nuevo ingreso y el aislamiento total (“lockdown”) de confinados en sus respectivos módulos y celdas, entre otras gestiones. Además, se reforzó el equipo de protección de los oficiales como método de prevención. Nuestros oficiales y supervisores están haciendo un gran esfuerzo por garantizar la seguridad de la población y todo el entorno”, puntualizó el secretario del DCR.